La gestión de las emociones, hacer ejercicio físico de intensidad moderada, y prestar atención a la alimentación son el trípode que sostiene un buen embarazo. Los controles médicos nos informarán si todo el proceso transcurre con normalidad.

La mujer embarazada tiene dos objetivos principales: cuidarse y cuidar del hijo que está gestando. Cada vez hay más estudios que recogen cómo el estrés, que es una emoción negativa, una alimentación con exceso de azúcar o grasas y la falta de ejercicio afectan no solamente a la madre sino al desarrollo del embrión y condicionan el futuro del niño.

Madre e hijo desarrollan una relación simbiótica donde lo que le sucede a uno afecta al otro. Como en la relación de las dos personas solo hay una con capacidad de tomar decisiones: la madre, es ella la que debe tomar aquellas que más beneficien a los dos.

En Fundación REDMADRE en colaboración con la asociación ‘Lasmujeresnosmovemos’ hemos desarrollado el proyecto ‘Vive un embarazo saludable’, que nace con el objetivo de formar a las madres de una manera práctica sobre este trípode y de informar para que rechacen mitos, tópicos o falsas creencias que algunas pueden tener alrededor del embarazo y lo vivan de manera saludable, sin temores, pero con responsabilidad.