Queridos amigos: En esta 8º Edición del Mapa de la Maternidad, quiero compartir un mensaje de esperanza, un mensaje que nos invita a mirar hacia el futuro con convicción al contemplar la maternidad como el acto más sostenible del mundo. Siempre es un acto de valentía, de fe en el futuro y de confianza en el poder del bien. Aunque sabemos que muchas veces, las circunstancias lo empañan todo de vulnerabilidad…

En un mundo cada vez más complejo y lleno de desafíos, la maternidad sigue siendo una fuente inagotable de luz y esperanza. Por ello, nunca dejaremos de apoyar a la mujer en su ejercicio de libertad al optar por ser madre, asumiendo las dificultades que puedan surgir. La cultura de la vida, que celebra el nacimiento y el cuidado de los hijos, es infinitamente más poderosa que la cultura de la muerte, que se empeña en hacerse un hueco en nuestras sociedades con mensajes de desesperanza y resignación.

Como podréis leer en este estudio, el desamparo que muchas mujeres embarazadas aún experimentan por parte del sector público es escandaloso. Las políticas de apoyo a la maternidad, en muchos casos, son insuficientes o inexistentes, lo que deja a las mujeres sin el respaldo necesario para afrontar esta etapa vital de sus vidas. La falta de ayudas económicas, la ausencia de medidas efectivas de conciliación laboral y familiar y la desprotección social son realidades que necesitan ser urgentemente sustituidas por otras más justas.

Sin embargo, ya hay ejemplos que nos dan ánimo y fuerza para seguir luchando. En la Comunidad de Madrid y en La Rioja, por ejemplo, se han impulsado planes y ayudas que buscan apoyar de manera efectiva a las madres. A través de políticas de conciliación, asistencia económica, y programas que fomentan la maternidad, Madrid y La Rioja están demostrando que es posible dar pasos significativos hacia un modelo que valore la vida y apoye a las mujeres que eligen ser madres. Este tipo de iniciativas son faros de luz en medio de la oscuridad, ejemplos que nos muestran que no estamos condenados a la resignación y que, con voluntad política, el cambio es posible. Nos quedamos con un dato positivo: se ha pasado de 7 a 11 Comunidades Autónomas que ayudan a las embarazadas, sin embargo, todavía son muchas las que ni se han estrenado en estas ayudas. En toda España, sólo 7 diputaciones y 10 ayuntamientos tienen algún plan de apoyo para nuestro colectivo. ¿No son muy mejorables estas cifras?

En concreto, los políticos deben tomar medidas que aseguren la estabilidad económica de las familias, implementar sistemas de protección laboral para las mujeres embarazadas y facilitar la conciliación entre la vida familiar y profesional. Además, es vital promover programas de apoyo psicológico, social y sanitario que permitan a las mujeres llevar adelante sus embarazos con seguridad y dignidad. Deben también incentivarse políticas fiscales que beneficien a las familias y que hagan viable el deseo de tener hijos, especialmente en contextos donde la precariedad económica es un factor determinante en la caída de las tasas de natalidad.

En Fundación REDMADRE, a través de 50 asociaciones repartidas por España con más de 1.000 voluntarios apoyando la causa, trabajamos por un futuro donde ninguna mujer se sienta sola ni desamparada en su decisión de ser madre. Donde las administraciones públicas comprendan que apoyar la maternidad es la inversión más sostenible que una sociedad puede hacer, porque sin nacimientos no hay futuro. Queremos una sociedad que valore la vida desde su concepción, que vea en cada nacimiento una promesa de futuro y no una carga.

Creemos en el poder transformador de la vida, en la capacidad de cada madre de cambiar el mundo a través de sus hijos. Y, sobre todo, creemos que es responsabilidad de todos, y en especial de quienes ocupan puestos de responsabilidad pública, apoyar sin reservas a las mujeres que eligen la vida, proporcionándoles los medios y el respaldo necesario para ejercer su maternidad con dignidad y esperanza.

Sigamos luchando por un país que celebre la vida, apoye a las madres y construya un futuro lleno de esperanza para todos.