El pasado 25 de noviembre se celebró el ?Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer? como cada año desde 1.999, sin que realmente haya cambiado mucho esa realidad. Es más, en estos últimos años han surgido nuevas formas de violencia contra las mujeres, como constatamos cada día en REDMADRE por toda España.
Nuestra experiencia de trabajo con mujeres que viven una situación de angustia y preocupación en su embarazo nos lleva a afirmar que:
- Es violencia contra la mujer negarle la posibilidad de ser madre cuando ya está embarazada con amenazas de abandono de su pareja, pérdida del trabajo, del hogar familiar, muchas veces con engaños y presiones de todo tipo.
- Es una forma de maltrato hacia la mujer, por parte de todos, no reconocerle su derecho a aceptar y asumir su maternidad como un valor personal en su vida; o ejercer sobre la embarazada y madre una discriminación laboral y hasta casi un rechazo social culpándola de ese embarazo en lugar de darle la enhorabuena y prestarle todo nuestro apoyo y cariño.
- Por último, es violencia contra la mujer, no hacer todo lo que esté en nuestras manos (ciudadanos de a pie, políticos, todos) para asistir a una embarazada con dificultades cuando más nos necesita o mantener leyes injustas que sólo benefician al negocio del aborto y atentan contra la vida del hijo por nacer y contra la salud y el bienestar de la mujer embarazada.
Es responsabilidad de todos porque hay salida; por eso no podemos dejar la eliminación de la violencia contra la mujer en una mera celebración de un día al año mientras haya cientos de miles de mujeres que nos necesitan cada día.