Mucho ha llovido desde que en los años 90 la prensa informó de un gran escándalo que nos horrorizó a todos: Olga Kovalenko, gimnasta del equipo soviético que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de México 68, denunció que fue forzada por sus técnicos a quedarse embarazada y, luego, a abortar meses después.
En las últimas décadas han aflorado muchos casos donde a las deportistas se les retiraba la menstruación por razones de la competición y eran sometidas a prácticas indignas e ilegales.
La maternidad forma parte de la sexualidad de la mujer, y las deportistas, en todos los lugares, han sufrido un control de su sexualidad de tal calibre que podríamos considerarlo contrario a los derechos humanos. Toda mujer tiene derecho a plantearse la maternidad como una posibilidad en su vida sin que nadie pueda tomar esa decisión por ella, y mucho menos, preparadores, entrenadores, seleccionadores, etc. bajo la amenaza de salir de la competición.
Desde hace unas semanas las declaraciones de Ona Carbonell acerca de su experiencia con la maternidad están en todos los medios. Frente a la pregunta del entrevistador sobre si la maternidad es un tema tabú en el deporte, ella contesta: ‘Sí y todavía creo que sigue siendo un poco tabú. Hemos mejorado, pero nos falta mucho camino por recorrer. Vamos por el buen camino y espero que al menos allanemos el camino de las que vengan’.
Fundación REDMADRE agradece a todas las deportistas, que como Ona, están haciendo visible una realidad: la de la dificultad de la maternidad en el deporte; agradecemos que estén reivindicando contratos laborales que les permitan una baja por maternidad, reformas de los convenios y cambios legislativos para que no puedan ser despedidas; agradecemos que reivindiquen la lactancia en los entrenamientos y en las competiciones y que, en definitiva, luchen porque se remuevan los obstáculos para que cada vez menos deportistas abandonen la competición por causa de su maternidad.
Desde REDMADRE les ofrecemos nuestro apoyo y acompañamiento sobre todo si tienen un embarazo imprevisto y están en situación de vulnerabilidad para que nunca se encuentren solas.