Layla, una mamá valiente que nos cuenta su experiencia. Ante un embarazo imprevisto y pese a las dificultades ha seguido adelante con la vida de su hija, que desde su concepción ya siente el amor de su madre hacia ella.
«Me enteré que estaba embarazada y fue de sorpresa. Mi pareja quería tenerlo, pero yo no estaba lista. Ya han pasado 8 meses y aun no lo asimiló. Siento sus movimientos día a día, es mi hija y debo amarla y, pese a todo, asumir mi responsabilidad y aunque no sea fácil, porque siempre he padecido de depresión y problemas con mi pareja, debo seguir adelante».