Descarga aquí el Barómetro de la Familia en España 2015

El último Barómetro de la Familia en España realizado por el Instituto Internacional de Estudios sobre la Familia The Family Watch señala que el 65,9% de los hogares españoles apuntan a la infancia como principal víctima de la crisis económica, por encima de las demás franjas de edad asociadas a la edad adulta. De hecho, la mayoría se reconoce «de acuerdo» o «muy de acuerdo» con la afirmación de que la pobreza infantil «debería ser un asunto de Estado» en el que «deberían comprometerse todos los partidos». Según el estudio, las causas de la pobreza infantil son la destrucción de empleo (para el 94,9 %), la bajada de salarios (94%), la escasez de ayudas públicas (90,4%), la falta de acceso a servicios públicos (80%) y la región de España de España donde reside (71%). 

Además, el 60% de las famlias españolas considera que su calidad de vida ha disminuido en el último año y el 50% cree que su situación económica familiar se mantendrá igual dentro de un año. Estas son algunas de las percepciones recogidas en la investigación realizada por The Family Watch, con encuestas a más de seiscientos hogares de todas las comunidades autónomas.

También, el 43,5% de los encuestados califica de «regular» su situación económica actual, aunque el 24,5% cree que mejorará dentro de un año, según el estudio. 

La directora general de The Family Watch, María José Olesti, ha destacado la urgencia de contar con un Plan Integral de Apoyo a la Familia, que es «la gran esperanza» para disponer de mayores ayudas con el fin de mejorar la calidad de vida de las familias en el país. Ha defendido medidas de flexibilización del mercado laboral para favorecer la conciliación de la vida profesional y familiar, como la ampliación de las bajas de maternidad y paternidad, sin que ello suponga un coste excesivo para las empresas, así como la reincorporación de las mujeres al trabajo en condiciones similares, tras la baja.

El 43,8% de los padres estima que sus hijos vivirán peor que ellos, mientras que el 25,5 de los progenitores está convencido de que la situación de sus descendientes será mejor y el 19,1 cree que continuarán igual.

El barómetro revela que las familias hacen un mayor esfuerzo para cubrir las necesidades básicas de alimentación (74,7%), transporte (68,3%), salud y ropa (65,3%), vivienda (58,2%) y educación (55,3%).

Olesti ha reclamado apoyos para las familias, tras indicar que «la crisis ha recaído principalmente en las generaciones de menos de 45 años», que han perdido sus empleos o han sido recolocados en puestos de menor cualificación y salario, lo que unido al pago de una hipoteca y la atención de los hijos ha aumentado su empobrecimiento.

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