La población embarazada en España tiene una media de edad de 30 años, pero las embarazadas que solicitan acompañamiento en REDMADRE tienen una media de edad de 25 años. Es un grupo que, en esta quinta ola, tiene alto riesgo de infectarse de coronavirus, al ser población joven y no vacunada en su mayoría.
Poco a poco los investigadores van publicando estudios sobre cómo puede afectar la COVID-19 a las embarazadas y a sus hijos, sobre la conveniencia o no de vacunarse dependiendo del tiempo de gestación, y acerca de qué vacuna está indicada en cada caso.
Nuestra misión respecto de la COVID-19 es doble: por un lado, remitir a la embarazada a su ginecólogo y matrona de referencia para que sean ellos los que le informen más profundamente acerca de la enfermedad y de las vacunas; por otro lado, debemos aplicar todas las medidas profilácticas que son preceptivas en un local público: desinfección continua del mobiliario, puertas y suelo, toma de temperatura, uso de gel, distancia personal de dos metros y aforo limitado, para evitar en lo posible un contagio.
REDMADRE superó el reto del confinamiento y logró acompañar a miles de mujeres embarazadas. Ahora nos enfrentamos a un nuevo reto que es conseguir que todas las sedes de REDMADRE sean seguras para las mujeres que recurren a nosotros y para los voluntarios y trabajadores. Contamos con un equipo fantástico de personas que no se asustan y cada día se acercan a nuestras sedes a ofrecer su tiempo, tanto para la escucha y el acompañamiento, como para la organización de la logística. ¡Gracias a todos por cuidaros y cuidar!
