No. Nadie puede obligarte a atentar contra tu integridad física, ni la de tu hijo: ni tu pareja, ni tus amigos, ni tu jefe, ni tu médico, ni tu familia.
Si eres menor de edad y no quieres abortar puedes buscar amparo en las autoridades que defenderán tu derecho a continuar con el embarazo. Si tienes dudas llámanos podemos asesorarte, aunque seas menor pero mayor de 16 años.