Las voluntarias del ropero van todos los martes a la sede de REDMADRE Murcia, para limpiar y dejar en condiciones la ropa y enseres que necesitan nuestras madres para sus bebés. También en estos momentos difíciles de pandemia, aunque sin descuidar en ningún momento las medidas de protección obligatorias, no desisten, no se dejan vencer por el temor, no se arrugan, no pierden el celo por su labor.
Un trabajo oculto pero fundamental. Sin ellas sería imposible realizar nuestro cometido en favor de tantas mujeres que nos solicitan ayuda.